Iglesia Ortodoxa Apostólica Antioquena de España: la secta de los exorcismos

Joseph René Vilatte (1854-1929), sacerdote francés de la Iglesia Católica Antigua de Suiza, en 1892, viajó a la India y terminó siendo consagrado obispo de la Iglesia Ortodoxa Siria de Malankara.

Después, Joseph René Vilatte consagró de forma irregular como “obispos” a masones, martinistas, rosacruces, varios de los cuales terminaron fundando sectas. Una de las líneas de los “obispos” consagrados por Vilatte fue a parar a la secta satánica OTO, Ordo Templi Orientis, por poner un ejemplo. Por tanto, del linaje de Joseph René Vilatte, han surgido sectas ocultistas y satánicas.

Una de las líneas de los “obispos” consagrados por Joseph René Vilatte llegó hasta el masón, martinista y gran maestre templario internacional, el francés Ivan Drouet de la Thibauderie (1916-1994).

Este personaje de origen aristocrático fue un erudito del ocultismo dedicado a dirigir órdenes iniciáticas y a escribir libros sobre sus misterios. De su pluma surgieron libros como Les Clavicules des pantacles: la foi des catacombes, Tradition chevaleresque du Proche-Orient, etc.

En 1977, Ivan Drouet de la Thibauderie consagró irregularmente “obispo” en París al español Alfonso García Palma, masón y rosacruz como él. Y, con la consagración en el bolsillo, García Palma fundó en Barcelona la secta ortodoxa-ocultista Iglesia Ortodoxa Apostólica Antioquena de España.

Se da la circunstancia de que Alfonso García Palma ya conocía la tradición de Joseph René Vilatte por una línea de sucesión distinta, por ser miembro de la Fraternitas Rosicruciana Antiqua-OTOA de Arnoldo Krumm-Heller.

En la tradición del francés Joseph René Vilatte que llegó hasta Alfonso García Palma y después a su hijo Alfonso García Burgas, su sucesor tras su fallecimiento en 1985, los exorcismos tuvieron una presencia muy importante. Varios “obispos” fueron practicantes de los mismos y escribieron sobre ellos.

Desde el principio de su andadura, la secta ortodoxa-ocultista Iglesia Ortodoxa Apostólica Antioquena de España también los asumió y practicó sin problemas, tanto estando al frente de ella su fundador Alfonso García Palma (1977-1985) como su hijo y sucesor Alfonso García Burgas (consagrado sacerdote por él y responsable a partir de 1985).

En el blog de la secta, en la columna de la izquierda y en la entrada del 15 de noviembre de 2011, aún se puede leer una nota que lo dice todo: “Servicios y Sacramentos. Nuestra Iglesia ofrece los servicios de Bendiciones de domicilios y locales de trabajo, e imparte todos los Sacramentos cristianos y exorcismos”.

Dos años después de ese anuncio, la secta Iglesia Ortodoxa Apostólica Antioquena de España con Alfonso García Burgas al frente fue acogida en el local de los carismáticos del grupo Ágape de Barcelona, situado en la calle Roselló, número 33. Y allí permaneció hasta el año 2017, celebrando sus peculiares misas de carga ocultista y otros ritos como los exorcismos mencionados. Al menos, eso se desprende del anuncio de 2011 que hemos recuperado.

Los carismáticos, obsesionados con los exorcismos, debieron pensar que Alfonso García Burgas era el fichaje perfecto. Fueron tiempos de gloria, porque luego llegaron las parroquias de los Carmelitas de Barcelona y Badalona, las misas con carga ocultista de cara al público y no en un piso discreto alejado de miradas extrañas, las denuncias de fieles católicos por ocultismo y las definitivas expulsiones de las iglesias carmelitas en 2023 (Barcelona) y 2024 (Badalona).

Precisamente, en ese fatídico 2024 para García Burgas, la Conferencia Episcopal Española de la Iglesia católica aprobó un documento que alertó sobre las prácticas ocultistas como las sanaciones y los exorcismos, apuntando hacia los carismáticos de forma contundente. El paraíso ocultista y exorcista se esfumaba… Fue la puntilla.

Lejos quedan los tiempos en los que Alfonso García Burgas y su “iglesia” se instalaban con facilidad en iglesias prestadas o en los que hechizaban a los carismáticos con sus conocimientos sobre los exorcismos y otras prácticas heredadas de la tradición de Joseph René Vilatte. Muy lejos.